Las 7 cosas más vergonzosas que pueden pasar en la cama (¡y cómo reírse de ello!)

Seamos realistas, todos queremos que el momento íntimo sea perfecto, una escena digna de una película, con la banda sonora adecuada y cada movimiento en el lugar correcto. Pero la realidad suele ser... menos cinematográfica y más parecida a una comedia romántica . Los acontecimientos inesperados, especialmente para los hombres, pueden transformar un encuentro candente en una serie de chistes divertidos (o vergonzosos, según el punto de vista). ¡Veamos juntos algunas de las situaciones más comunes y cómo reírnos de ellas!

1. La mágica desaparición de la fuerza

¿Conoces esas películas de acción donde el protagonista es indestructible? Pues bien, en la cama, la fuerza del “protagonista” puede esfumarse repentinamente, dejándote ahí, con la mirada inquisitiva, mientras por dentro piensas: “¿Ahora mismo?”. .

¡No entrar en pánico! El cuerpo no es una máquina perfecta y puede suceder. Es mejor tomárselo a la ligera. Siempre puedes decir: "Démosle tiempo a Batman para que se recupere" y tal vez cambiar el ritmo.

2. Efectos de sonido involuntarios

Hiciste todo lo posible para crear la atmósfera adecuada, luces suaves, música sensual, pero luego... aquí hay un ruido involuntario que no tiene nada de sexy. Sí, estamos hablando de esos sonidos que pueden escapar del cuerpo, y no estamos hablando de palabras dulces.

Si esto sucede, la única solución es reír. Puedes fingir que es la cama o decir: "¡Oye, ese es el sonido de la pasión!". . ¡Humor siempre!

3. El "movimiento ninja" que no deberías haber hecho

Decides probar un nuevo movimiento, quizás inspirado en una película o revista... y termina en desastre. Un calambre repentino, una caída de la cama o, peor aún, un rodillazo involuntario a su pareja.

¡En realidad no es nada serio! La próxima vez podrás decir: "Eso fue sólo una demostración práctica de judo, ¡ahora volvamos a las cosas serias!". .

4. El "¿eso es todo?" post-rendimiento

Todo ha ido genial, estás ahí, satisfecho y orgulloso de ti mismo, pero tu pareja parece... menos entusiasmada. Quizás un poco más de entusiasmo por su parte no vendría mal, ¿verdad?

¡No es el fin del mundo, sólo un poco de comunicación! Puedes bromear y preguntar: "¿Qué tal un bis, tal vez esta vez con efectos especiales?". .

5. ¿Estás durmiendo? ¿En serio?

La relación acaba de terminar y antes de que puedas darte la vuelta para decir algo agradable, ya estás en el país de los sueños . Dormirse inmediatamente después es prácticamente el cliché más común entre los hombres.

Si esto sucede y te despiertas y descubres que tu pareja sigue despierta y quizás un poco molesta, siempre puedes bromear con un "¡Cariño, he estado soñando contigo! Nuestra relación me ha dejado sin aliento... ¡y despierta!". " .

6. El condón fantasma

Momento de pánico: todo termina y... el condón parece haber desaparecido en el aire. Empiezas a buscar como si fueras Sherlock Holmes, pero sin mucho éxito.

¿La solución? Evita el pánico y ten calma, con tacto y paciencia todo se solucionará. Y siempre puedes decir: "¡Es tan pequeño que parece Houdini!" .

7. El despertador para la cita con la realidad

Olvidaste apagar tu teléfono y... en el momento justo, suena la notificación de trabajo o la alarma para el día siguiente. El romance se ve interrumpido por un “bip bip bip” y te sientes como el anti-Cupido.

¡El truco consiste en no dejar que la tecnología arruine el momento! Todo lo que se necesita es un comentario como "¡Parece que mi jefe también está enamorado de nosotros!". y seguir sin drama.

Conclusión: vergonzoso sí, pero nunca desastroso

Todos estos pequeños "accidentes" forman parte de la vida íntima de cada uno. La clave es tomárselos con humor, porque reír juntos es uno de los ingredientes fundamentales para una relación feliz. Al final, ¿a quién le importa si no todo es perfecto? Lo importante es que haya pasión, complicidad y, sobre todo, muchas ganas de divertirse… ¡dentro y fuera de la cama!